jueves, 17 de septiembre de 2009

No me digas adios....


Sé que estás ahí porque yo estoy detrás de tí, en la esquina de la calle, mirando cómo te maravillas con cada uno de los trazos del pincel, viendo cómo sientes cada letra con la misma intensidad que yo al pintarlas.
Entonces te giras hacia mí con los ojos anegados en lagrimas, buscando un por qué, una respuesta, darme las gracias quizás.

Y yo muevo los labios sin articular sonido alguno diciendote. "Te dije que podía demostrarlo..."

Entonces tu giras la cabeza y lo vuelves a mirar, sigue ahí...tan limpio e impecable como ese amor que nunca se fue. Vuelves la cabeza de nuevo hacia la esquina donde estaba apollada pero ya no estoy.

Corres y me ves a lo lejos, corres más aún y te plantas frente a mí.

-A donde vas?-y sonríes, feliz porque ahora sabes que es verdad.
-Me voy...nuestros caminos se separaron. Es cierto que el amor sigue ahí y no creo que se vaya, pero la historia no tiene final feliz.- y miro al suelo
-No, sí lo tiene. Yo te amo, y tu me has demostrado que tu a mí también.-y me miras espectante esperando un sí.

-Ya...pero has dudado de mí durante todo este tiempo. No me has mirado a los ojos, no me has dirigido la palabra, nisiquiera has contestado a esos cientos de mensajes que te he mandado. Me has negado saludos y despedidas y me has atacado y hecho llorar.- y lo digo
-Pero tu...-empiezas con odio.
-Es cierto, yo he herido el amor, pero tu lo has matado. Siempre te he dicho que mi amor no era como el resto...mi amor es puro, sale del corazón. A veces es caprichoso, a veces duele, pero no sé amar de otra manera...-y las lagrimas comienzan a inundar mis ojos
-Entonces?- y comienzas a llorar

-Entonces sólo queda decir adios-y intento sonrreir.


Te acercas a mi oido y me susurras que me amas, que no va a cambiar....coges mi mano y la pones en tu pecho. Yo noto tu corazón desvocado...
-Lo notas? Quizás esté moribundo el amor, pero aún no está muerto. Ves como se esfuerza por latir con fuerza?- y sonrries


Y te beso...y comienza a llover, pero nos quedamos así...besandonos bajo la lluvia. Yo sonrio, tu sonries....sabemos que no es un adios.

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