Es una chica rubia, ojos verdes y mirada despistada. Ríe con ganas, llora con fuerza y todo lo que ocurre en su vida está pintado con rotuladores carioca de colores.
A veces, cuando tiene un mal día, se tira al suelo y patalea, llora, chilla y se encara con cualquiera que le diga que no tiene suficientes razones.
Le gusta hablar, reirse del mundo, caminar a trompicones...y si se tropieza, ella siempre se levanta. También le gustan las cosas de siempre, las que perduran, no le gustan los cambios y es extremadamente exigente consigo misma. Odia defraudar y defraudarse a si misma y por eso no permite que los demás la defrauden,
Cuando se levanta por la mañana tiene ya el desayuno preparado, se viste y prepara y hace todos los días el mismo camino. En su camino hacia el colegio siempre está el abuelete que dice "buenos días" con esa cara que hace le hace reír, y también está el chico de la sonrisa, solo o acompañado, con el que lleva jugando al despiste meses.
A ella le gusta ese trayecto más qe ningun otro en el mundo...le gusta decirle hola al señor y sonrreirle a aquel chico..
Sí, adora la monotonía...pero también adora saltarse las reglas.
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