jueves, 19 de marzo de 2015

Hoy es el día de mañana que tanto te preocupaba ayer.

Una vez dije aquí que no había nada más vacío que escribir sin pasión; pues bien, si que hay algo más vacío, y es vivir sin ella.
Olivia siempre había sido muy fan de hundirse en cualquier vaso medio lleno que se pusiera en su camino, se pasó muchos días de su vida llorando por cosas que salieron mal, y pese a todo siempre se había considerado una persona feliz y llena de pasión por cada ínfimo rasquicio de vida.
Tenía un lápiz y un cuaderno en blanco donde podía reinventar su mundo cada vez que alguien lo hacía pedazos, y eso era suficiente.